4.1 Para uso en la oficina, se recomienda elegir un soporte lumbar con mejor apoyo. Pero no será efectivo si es demasiado suave.
4.2 En cuanto al grado de ajuste, debe haber curvatura. Así la espina lumbar puede encajar bien en la almohadilla lumbar, y estará apoyada.
4.3 La transpirabilidad debe ser muy eficiente, para que no resulte incómodo su uso en verano.
4.4 Altura ajustable. Debido a que los escritorios tienen diferentes alturas, la almohadilla lumbar debe ser ajustable en altura.
Además, las personas toman diferentes posturas y posiciones individuales al sentarse. Las investigaciones muestran que las personas ajustan sus posturas en promedio cada 30 minutos. Cada postura necesita el ajuste y el soporte más cómodo, lo que requiere un ajuste flexible del soporte lumbar. En los últimos años, en el mercado han existido muchos soportes lumbares, divididos en izquierda y derecha o con marcos traseros en forma de alas.
4.5 El efecto rebote también debe ser el adecuado, y no se puede elegir un cojín demasiado suave para lograr una comodidad temporal.
4.6 Vale la pena considerar una sala de control o una silla de centro de llamadas como Heathrow, para sillas de oficina de servicio pesado.